Libros leídos

27 de septiembre de 2010

Crónica del pájaro que da cuerda al mundo, de Haruki Murakami

Cada vez que termino de leer una novela (sobre todo cuando no ha sido de fácil lectura), me dejo llevar por la impresión que me dejó. El sentimiento que se llevó el libro. Y digo se llevó, porque es como si una pequeña parte mía se hubiera ido con la historia, con los personajes. Y a su vez me hubiera dado otras cosas a través de sus páginas. Como si yo fuera cada vez menos yo. Como si se hubiera apoderado de mi otra persona, otro espíritu.

Eso mismo me pasó con Crónica del pájaro que da cuerda al mundo. El libro fue toda una epifanía para mí. Estaba en la librería comprando libros de cuentos para mi sobrina, estaba ya en la caja sacando la billetera, cuando entra un hombre. Le dice a la cajera que quiere cambiar el libro que había comprado porque tenía olor a desodorante de ambiente...En fin, locos hay en todas partes y la chica le dijo que escogiera cualquier otro, que no había problema. La cajera me da el libro para que yo lo huela (si, eso hizo) y cuando lo hago (no tenía olor a nada, más que a libro nuevo) y veo el título... Algo se despejó en mi mente. Como cuando te enamorás. No sabés por qué, pero si sabés que eso es lo correcto, aunque luego vaya mal. Y me pasó con Crónica... Sabía que tenía que tener ese libro sí o sí entre mis manos para siempre....


El libro trata sobre un hombre de 28 años, que está momentáneamente sin trabajo: Tooru Okada. Vive con su mujer, Kumiko, quien sigue trabajando. Un día el gato, Noboru Wataya, desaparece. Y Tooru recibe extrañas llamadas telefónicas de una mujer. Ese es el origen, el principio, el destape de la cacerola...
Porque la novela retrata la vida de estas dos personas (más la de él que la de ella) en dos planos. Uno "real" y otro "imaginario". Noboru Wataya, además de ser el gato, es el nombre del hermano de Kumiko. Un ser repelente, frío como un témpano, oscuro como un abismo (y tan profundo como el mismo). En él se podrían centrar muchas de las monstruosidades que ocurren puertas adentro en cualquier lugar.

Los diferentes personajes que le dan vida a la historia, parecen circunstanciales al comienzo, pero luego se tornan indispensables para la trama. Pasan por ahí las hermanas más raras y new age que haya conocido: Malta y Creta Kano. La dueña de una técnica secreta, pero que nunca se sabe qué es exactamente lo que hace: Nutmeg, y su hijo Cinnamon. La vecina adolescente y bastante metida, May Kasahara. Y por supuesto, el pájaro-que-da-cuerda. Un pájaro que ninguno puede ver, y sólo unos pocos pueden escuchar. Que hace un cri-cri como si estuviera dándole cuerda a algo...al mundo quizá.

Si fuera una historia de super héroes, Tooru Okada sería el héroe y Noboru Wataya el villano. El contraste continuo entre luz y oscuridad y lo antagónicos que son ambos personajes, podrían dar esa impresión. Pero yo prefiero pensar que en algún punto ellos "son" la misma persona. Aunque cada uno sacará sus propias conclusiones. Cuando uno lee novelas de este tipo, nunca la lectura es lineal, nunca el final es solo uno...


El estilo de Murakami me gusta. No solamente eso. En algún punto yo era Tooru Okada. Me había transformado (como el protagonista) y mi mundo "real" le había dejado paso al "imaginario". Por eso, cuando terminé la novela y me di cuenta que yo ya no era Tooru, sentí que el libro, con la última página, se había llevado también parte de mi existencia...

2 comentarios:

  1. Realmente este libro es una de las mejores obras de Murakami (del cual soy devoto lector)... Tal como decis, leerlo es sumergirte en su universo ficticio (ficticio?) y si tienes suerte recibir una epifania y enseñanzas. Y la sensacion de desamparo, de tristeza y nostalgia que te abraza cuando terminas de leer la novela, es sorprendente.

    Hay varios libros en los que logra el mismo efecto, pero enfocandose mas en el drama (tales como "tokyo blues" y "Al sur de la frontera, al oeste del sol") y realmente se debe tener en cuenta su compilado de cuentos... hay verdaderas joyas ahi.

    Y los libros, aun con olor y maltratados, siempre tienen algo para decirte. Brindo por vos y por tu libro, con olor a desodorante o no. xD

    ResponderEliminar
  2. Gracias, Dago. Muy lindas tus palabras. Después de leer Crónica, leí "Sputnik, mi amor" y tienen algunos elementos en común. Claro que Crónica es un ladrillo de más de 800 páginas y es mucho más profundo que Sputnik. Cuando iba leyendo la historia de Tooru, me parecía que estaba leyendo mi propia historia. El protagonista siente y piensa muy parecido a mí. No sé cómo expresarlo, es como una sensación de estar viéndose en un espejo literario. Me pasa a veces, aunque no es muy común. Y si no fui a la única que le pasó, me parece genial. Justo estaba discutiendo el libro con un amigo, y le estaba diciendo que, no importan las distancias o las épocas, los seres humos seguimos siendo básicamente eso...humanos. Besos y gracias por pasarte por acá.

    ResponderEliminar

Este es un Salón de Té, un lugar frecuentado por damas y caballeros, por lo tanto demostremos buenos modales y educación.

Quizás también le interese

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...